No es un monja normal, se diría que es cojonera por que toca los cojones, se considera un monja de clausura y no para de decir la injusticias que ve cada día en su entorno y da igual todos lo impedimentos por que ella llega asta el final. Sobre todo ella quiere un sistema unido y gobernado por todos por que no cree que los políticos puedan gobernar solos.Desterrar la violen y empezar a tener gestos de paz en todo el mundo aunque es de vergüenza lo que esta pasan aquí criticando y proviniendo las injusticias sin hacer nada.
"Es urgente una renovación total de la Iglesia. Es un proceso lento que llevará años, pero se han producido cambios que hace un año resultaban impensables", comenta sor Lucía quien, aunque no espera la llamada de Francisco, asegura: "Algún día nos encontraremos y nos daremos un abrazo de sintonía".
A Sor Lucía Caram le llueven críticas y elogios de todo tipo. Es lo que tiene el estrellato y pasar a formar parte del circo mediático. Para ser monja no se le ve preocupada por las tentaciones sino que aprovecha su fama con un cuestionable designio divino. A esta monja el hábito le ha dado altos vuelos, no es una religiosa cualquiera, se trata de una dominica contemplativa cuyo “claustro es el mundo”.
Jose Manuel Illera Nº17
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